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Congresista María Acuña se niega a pagar deuda millonaria a la SUNAT y desata polémica nacional

  • Foto del escritor: agencia ultimahora
    agencia ultimahora
  • 8 abr
  • 2 Min. de lectura

María Acuña, congresista de APP, enfrenta críticas por negarse a pagar una deuda millonaria con la SUNAT


En un país donde la corrupción y la evasión fiscal han sido históricamente temas sensibles, un nuevo escándalo sacude el Congreso peruano. María Acuña, congresista de Alianza para el Progreso (APP), se niega a pagar una deuda de más de 3 millones de soles a la SUNAT, desafiando no solo a la autoridad tributaria, sino también a la confianza ciudadana.


Según un reporte de Infobae, la SUNAT ha emitido múltiples requerimientos a Acuña por deudas tributarias acumuladas, incluyendo intereses y multas. Sin embargo, la legisladora, en lugar de regularizar su situación, ha optado por impugnar las resoluciones, alegando supuestos vicios en el proceso. Mientras tanto, la ciudadanía exige transparencia: ¿cómo una representante del pueblo puede negarse a cumplir una obligación que cualquier peruano común sí debe enfrentar?


Lo más polémico es que APP, el partido al que pertenece Acuña, ha promovido discursos de "austeridad y lucha contra la corrupción". ¿Cómo explica la bancada que una de sus integrantes acumule una millonaria deuda con el Estado? Si un ciudadano promedio evade impuestos, las consecuencias son inmediatas; pero cuando se trata de una congresista, el caso se judicializa y se alarga indefinidamente.


Este caso no trata solo de 3 millones de soles. Trata de una cultura de privilegios que parece blindar a ciertos políticos. Mientras el Perú lucha por recuperar la credibilidad en sus instituciones, acciones como las de Acuña refuerzan la percepción de que existen dos tipos de justicia: una para los poderosos y otra para el pueblo.


La pregunta queda en el aire: ¿pagará María Acuña lo que debe, o su puesto en el Congreso será su escudo? Los ciudadanos merecen respuestas claras, porque cuando quienes hacen las leyes las incumplen, la democracia misma queda en deuda.


Fuente: Infobae

Redacción: Jhostin García

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