En los últimos años, la tecnología ha dado un paso gigante en la evolución. Una de las innovaciones que viene generando un entusiasmo sin precedentes es la aparición de aplicaciones como Chat GPT, entrenado para mantener conversaciones. Pero lo interesante no es el hecho de que conteste las preguntas, sino que puede lograr realizar una redacción de 1000 palabras sobre un tema en concreto.
Así como hay personas que utilizan estas plataformas para actualizarse, en cambio, hay otras que no, y no es porque no sepan, sino porque prefieren quedarse en su zona de confort pensando que lo conocido es lo más seguro, pero juegan un arma de doble filo. No podemos adentrarnos en el futuro con miedo, debemos ser cautos, pero abiertos al progreso.
Lograr una máquina que tenga una inteligencia artificial similar al de un ser humano es el mayor reto de todos los científicos y uno de los objetivos más ambiciosos. El temor de ser suplantados o controlados por robots ya pasó a un segundo plano. El hombre se acostumbró a la practicidad e inmediatez quedando demostrado el ahorro de tiempo y dinero al automatizar los procesos y tareas de rutina. Existe miedo en lo desconocido, pero si seguimos avanzando, podemos encontrar respuestas en lo que en un inicio tan solo fueron preguntas.
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