Escrito por: Joohn Raúl Oblitas Carreño.
El Gabinete del Dr. Caligari es uno de los grandes clásicos de terror del cine mudo, su nombre original es Das Kabinett Des Dr. Caligari, se filmó en 1920 en Alemania, dirigida por el alemán Robert Wiene, a los 47 años de edad. Wiene nació el 27 de abril de 1873 en Breslau donde dirigió muchas películas con gran éxito y luego de la llegada al poder de los nazis se exilió en París, donde falleció mientras rodaba Ultimátum en 1938, película que finalizó Robert Siodmak .
Robert Wiene desde muy joven demostró interés por el mundo del teatro hasta el punto de convertirse en actor y director. Esa experiencia que empezaba a ganar le serviría posteriormente para incursionar en el cine -en aquella época el cine era el ‘boom’-.
Robert se apoyó en el trabajo del productor Erich Pommer, mientras su permanencia en los estudios UFA, recurrió a los guionistas, directores de fotografía y decoradores de la casa para desarrollar cada uno de sus ‘films’.
Wiene devutó en el fabuloso mundo cinematógrafico con la película La pobre Eva (1915), y luego de poco más de diez películas, deslumbró al mundo dirigiendo The Cabinet of Dr. Caligari –El gabinete del Dr. Caligari- (1920). Este incomparable personaje es considerado uno de los grandes directores que sostienen con su producción la industria nacional de Alemania.
El gabinete del Dr. Caligari es el punto de referencia para que podamos entender a grosso modo el estilo de producción alemana de la década de los veinte. Por qué en aquella época se venía desarrollando una corriente creativa llamada ‘expresionismo’, que se caracterizó por la búsqueda incansable de expresar las filias y fobias del ser humano, no se preocupaban por la perfección técnica.
En el expresionismo se busca generar en el veedor o espectador un impacto, básicamente emotivo, tanto en las artes plásticas, la literatura y el cine. Las herramientas que se utilizaron en esta corriente fueron la disformidad y la agresividad en la composición.
Esta búsqueda por subordinar las formas a los sentimientos ha estado vigente tanto en el arte románico, en los monstruos del infierno del medioevo, en las figuras del Greco, como en los trabajos de Van Gogh o Gaugin (postimpresionismo).
En el siglo XX se da inicio a una nueva vanguardia llamada expresionismo, que contrasta las técnicas y modelos que prevalecían en Europa desde el renacimiento así como el radical racionalismo de géneros como el cubismo.
El gabinete del Dr. Caligari es indudablemente la bandera del expresionismo en el cine, pues es la película que aportó más singularidades en cuanto al tratamiento del espacio y al uso de la luz (iluminar por detrás de la escenografía -se utilizó por primera vez esta técnica-) y desde el punto de vista social marcó una senda para reflexionar sobre la situación socio-política de la época.
En la película también se puede apreciar el uso de fondos con líneas sinuosas, que incluso llegan a ser deformes. Al igual que en el teatro en este film de Robert Wiene se expresan rostros desfigurados, tristes, alegres, intrigantes, desconcertados, es decir el rostro es el espejo de cómo se siente el personaje.
Esta película es una mezcla de modelos estéticos hipnotizantes que originan en el espectador pena o tristeza como si se tratará de una realidad; como el caso de Francis que imagina cosas y que de seguro pasará toda su vida en un instituto mental; y que el sonámbulo Cesaré pasará toda su vida como tal.
En otras palabras el espectador se queda con la sensación de que lo que ocurre en la película es real, pues se queda con una sensación de amargura al terminar la película. También se busca hacer reflexionar al veedor que lo que ve en este film es como una metáfora. Es decir que a veces la realidad de un individuo muchas veces no es la verdad, que solo se trata de un sueño, como lo es la misma vida en sociedad, la paz, la justica, etc.
Su película es el plato perfecto que mezcla adecuadamente una atmósfera tétrica, uso de recursos cinematográficos, el uso de ‘flashbacks’, También el espíritu lírico de los actores es muy importante pues expresan la intriga de inicio a fin.
Por otro lado, y más importante, es el adecuado uso de los claroscuros -que se usaron anteriormente en el barroco- bien definidos que expresan el mundo interior de los personajes, donde el poder visual juega un rol trascendente, que en varias partes del film hasta asustan (“Todo entra por el ojo”) .
El gabinete del Dr Caligari es conocido por muchos como una obra de vanguardia, es decir que está adelantada a su época, pues recordemos que EE.UU. y Alemania se enfrentarán posteriormente en la Segunda Guerra Mundial. Por otro lado, la similitud que se puede encontrar con la película y lo que pasa luego es que el Dr. Caligari podría ser el gobierno alemán y que Cesaré es un soldado-un soldado de Alemania-que hace lo que su gobierno le ordena sin reclamar ni opinar, como un sonámbulo.
En resumen es una gran película, una ‘joyita de oro’, que hasta la actualidad es considerada una gran obra de la cual muchos directores siguen recurriendo para inspirarse y crear nuevos ‘films’ de terror o suspenso. Y todo esto gracias al genial aporte de Robert Wiene un director adelantado a su época que finalmente fallece de cáncer en Francia en 1938, durante un rodaje.
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