La presidenta de la República, Dina Boluarte, ha generado controversia tras sus recientes declaraciones sobre el presupuesto necesario para la alimentación familiar. Durante una reunión con lideresas de las ollas comunes, Boluarte afirmó que, con un presupuesto de 10 soles y creatividad, las mujeres peruanas pueden preparar un menú completo que incluya sopa, segundo y hasta un postre. “Nos las ingeniamos, así somos las mujeres”, sostuvo la mandataria, refiriéndose a la capacidad de las mujeres para administrar recursos limitados.
Representantes de las ollas comunes calificaron las declaraciones de Boluarte como una burla a la dura realidad que enfrentan. Según explicaron, en la mayoría de estos comedores populares apenas se logra servir pollo o carne dos veces por semana, mientras que el resto de los días la comida consiste en caldos de huesos o cabeza de pescado. “Estamos lejos de poder hacer lo que ella dice. A veces ni siquiera tenemos lo básico para cocinar, y dependemos de donaciones para variar los platos”, afirmó una de las lideresas.
El contexto de las ollas comunes es un reflejo de la precariedad económica en la que viven miles de familias peruanas. Según datos del Instituto Nacional de Estadística e Informática (INEI), el gasto promedio mensual en alimentos de los hogares asciende a S/256, superado solo por los gastos en vivienda y servicios básicos. Esto pone en evidencia la desconexión entre las afirmaciones de la presidenta y la realidad que enfrentan las personas beneficiarias de estos programas.
El comentario de Boluarte no solo ha suscitado críticas entre las lideresas comunitarias, sino también entre diversos sectores de la sociedad, que consideran su discurso como un intento de minimizar las carencias de miles de peruanos. La indignación generada refleja la urgente necesidad de que las autoridades tomen medidas concretas para atender la crisis alimentaria, en lugar de recurrir a frases que parecen desconocer las dificultades diarias de los ciudadanos.
Redactora: Sedano Motta Sayuri
Comentarios