Fuente: anacion.com.ar
Redactado por: Jesús Aliaga
El espíritu del fútbol regresa a las gradas. Luego de más de un año de la pandemia
provocado por la Covid-19, los hinchas volvieron a alentar, desde las tribunas, los
partidos de la UEFA Champions League. Sin embargo, este no es inicio de un retorno a
la "normalidad" futbolística. El año pasado, el Comité de la UEFA dispuso de los
primeros protocolos de bioseguridad para el partido de la final de la Supercopa del 24
de septiembre.
Este solo marcó el precedente, el ensayo y error, de lo que se debería hacer en la
venidera temporada de las principales ligas de Europa. El documento elaborado, para
que las federaciones y los gobiernos de sus respectivos países, puedan garantizar
este retorno fueron los ‘Requisitos Mínimos de Salud e Higiene de la UEFA para el
Retorno de Espectadores’.
Una de las acotaciones principales fue la disposición de que cada liga tomara sus
propias decisiones respecto al nivel de riesgo epidemiológico de su nación. Recordemos
que España e Italia, principalmente, fueron los países europeos que tuvieron las cifras
más alarmantes por mortalidad. Por ello, tomaron la decisión de habilitar solo el 40% de
los estadios. Las mascarillas, el distanciamiento social, la prohibición de la venta de
alimentos y el certificado de vacunación, son los requisitos para que el público pueda
ingresar.
En el caso particular de Inglaterra, la Liga Premiere, pese a las críticas, decidió habilitar
el 100% de la taquilla. No obstante, recordemos que el porcentaje de vacunados
representa el 65% de la población (una de las más altas del mundo), además, al igual
que en La Liga y la Liga Tim, solo se permite el acceso a aquellas personas que cuenten
con las dosis correspondientes y el certificado. Las libertades inglesas vienen
acompañas de pruebas serológicas y de PCR antes de cada partido.
La nueva temporada estará marcada por un reajuste económico por las perdidas en
ingresos por concepto de venta de taquillas y la aceleración del proceso de vacunación
regional. A partir de ahora, cada política gubernamental de sanidad y las ligas
determinarán si las medidas protocolares fueron las acertadas. O, de lo contario,
extenderemos, mas aún, la incertidumbre por el fin de la pandemia.
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