El tema del fraude electoral en Venezuela ha sido una constante preocupación tanto a nivel nacional como internacional. Desde hace más de dos décadas, las denuncias de irregularidades en los procesos electorales han sido recurrentes, afectando la credibilidad y legitimidad del sistema democrático del país.
Fuente: chequeado.com
Uno de los aspectos más destacados ha sido el uso de recursos estatales para favorecer a los candidatos del partido en el poder. Estas acciones incluyen la manipulación de los medios de comunicación, la utilización de fondos públicos para campañas electorales y la presión sobre los empleados públicos para que voten a favor del gobierno. Además, se ha denunciado la existencia de irregularidades en el registro electoral, con votantes fallecidos que aparecen como activos y personas que votan múltiples veces.
Otra táctica empleada ha sido la inhabilitación de candidatos opositores a través de mecanismos judiciales y administrativos, limitando así la competencia y la posibilidad de alternancia en el poder. La falta de independencia del poder judicial y el control sobre el Consejo Nacional Electoral (CNE) son factores que han facilitado estas prácticas.
El impacto de estas prácticas fraudulentas es profundo. La confianza de los ciudadanos en el sistema electoral se ha visto gravemente erosionada, lo que ha llevado a un incremento en la abstención y el desencanto con la política. La comunidad internacional, por su parte, ha sancionado a funcionarios venezolanos y ha desconocido resultados electorales, lo que ha aislado aún más al país en el escenario global.
Redactado por: Valia Baldeon
Fuente: Chequeado
Comments