Los trastornos del control de impulsos son un grupo de trastornos de etiología neurobiológica que se caracterizan por la incapacidad del individuo para controlar determinadas conductas, y no puede dejar de realizarlas, aunque sepa lo perjudicial que es y las consecuencias negativas que puede tener.
Imagen: Ineco
Los niños con estos trastornos tienen problemas para controlar sus emociones y comportamiento. Si bien todos los niños son ocasionalmente incapaces de controlar sus impulsos, estos niños experimentan dificultades más allá de su edad, lo que lleva a un comportamiento que viola los derechos de los demás y entra en conflicto con las figuras de autoridad.
SINTOMAS:
Los síntomas varían dependiendo de la enfermedad específica.
Trastorno negativista desafiante: a menudo impaciente, a menudo enojado, irritable, fácil de captar la autoridad, discute las reglas y se niega a seguirlas, molesta intencionalmente, culpa a los demás por los errores, vengativo.
- Trastorno explosivo intermitente: agresión verbal y física a menudo recurrente y excesiva
DIAGNOSTICO:
A través de evaluaciones interdisciplinarias, afectivas, neuropsicológicas y neuro conductuales.
TIPO DE ENFERMEDAD:
-Trastorno de oposición desafiante
-Trastorno explosivo intermitente:
Cleptomanía
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COMO SE DEBE TRATAR:
Enfoques interdisciplinarios, personales, familiares, orientación escolar y en definitiva enfoques farmacológicos específicos
Los trastornos del control de los impulsos de inicio en el lactante requieren enfoques específicos y oportunos. En Ineco Infanto-juvenil nos centramos en afrontar las dificultades teniendo en cuenta al niño y su entorno. Buscamos realizar los cambios de manera sincrónica para que los resultados surtan efecto en el menor tiempo posible.
Fuente: INECCO
Redactado por: Alexandra Meza.
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